El Sábado por fin llegó la fecha que muchos estábamos esperando. Se celebraba la segunda edición del Esparto Beer, una feria sin grandes pretensiones y pocos elaboradores, pero que gracias al buen ambiente, al respaldo del ayuntamiento del pueblo, a la buena selección de cerveceros y al buen hacer de Alberto, el cervecero de Sesma Brewing, organizador del evento, un año más fue un éxito total. Como es costumbre últimamente en nosotros, nos acercamos por allí a la mañana a primera hora, para poder aprovechar al máximo el poco tiempo que teníamos para probar algunas de las cervezas que habían traído las micros que habían sido invitadas. La verdad es que conocer, lo conocíamos prácticamente todo, así que, con el hándicap del tener que conducir de vuelta siempre presente, dimos una vuelta de reconocimiento para hacer varios descartes y apuntar en la agenda lo que no podíamos dejar escapar.
Al primero que nos acercamos, fue al puesto de Cibeles. Repetía visita, y ya que el año pasado lo pasamos por alto, este año no quisimos volver a dejarlo de lado. Hacía tiempo que no teníamos la oportunidad de probar nada de esta micro, y su Imperial Ipa que tenía anunciada como "frutal" (cosas del marketing), nos dejó un buen sabor de boca. Una cerveza que sin ser excesiva, se deja beber fácilmente gracias a sus toques frutales y su amargor comedido. Dejamos para más tarde la compra de una botella de su colaboración con Popaire, Magna Mater, una APA que tenía muy buena pinta, pero que por cosas del directo, se nos olvidó comprarla después...
Los chicos de Gordexola también andaban por allí, así que nos acercamos a saludarles. Tenían la Epa! y la Kiskale, su brown ale, así que, pese a que ya la habíamos probado en Vitoria allá por principios de Agosto, nos decidimos por ésta última. Una cerveza muy rica con el sello lupulero al que nos tienen acostumbrados la gente de Laugar. Habrá que estar atentos a esta gente porque ya tienen a puntito de salir de la cocina su siguiente elaboración, una saison, y según escuchamos por ahí, pronto verá la luz también su imperial Stout, Aupa Tovarisch!, con la que ya han cosechado éxitos allá donde la han dado a probar en su versión "casera".
Después de su colaboración con Big Rock Brewery en tierras canadienses, Alberto Pacheco volvía a casa con la mochila llena de experiencias. Con él estuvimos charlando un breve espacio de tiempo, mientras probábamos su Porter. De trago fácil y sabores torrefactos, quizás echamos en falta un poquito más de cuerpo, aunque también es posible que sea porque estamos más acostumbrados a las Imperial Stouts que a las porters, estilo que no tenemos ocasión de beber muy a menudo, por lo menos de factura nacional.
Le tocaba el turno a Milana, cervecera de la que ya tuvimos oportunidad de probar el año pasado su Shipa, una ipa que nos gustó mucho. Como ya habíamos bebido bastante lúpulo, el cuerpo pedía algo diferente, y nos decantamos por la Trigo, cerveza que no habíamos probado aún, y que nos dejó buen sabor de boca también. Refrescante y de trago largo, ideal para el día veraniego del que pudimos disfrutar el Sábado. Aprovechamos para charlar con ellos de su proyecto paralelo, la cervecería Bregüer, en Valladolid, de la que habíamos oído hablar, pero desconocíamos quién estaba detrás. ¡Misterio resuelto!
Dejamos para el final el stand de Falken, o lo que es lo mismo, al binomio Óscar- Emilio. Allí estaba con su llamativa pizarra con luces, sus cachivaches informáticos, y cómo no, su nueva Cobra, imperial Ipa que probamos en Vitoria hace un par de semanas, pero que no pudimos disfrutar como es debido por las prisas. Esta vez sí que tuvimos tiempo de disfrutar de este cervezón que fue uno de los mejores de la feria para nosotros.
Había más, pero teníamos que volver, así que nos despedimos de Alberto, que esperemos que nos perdone por no haber bebido ninguna de sus cervezas, pero es que las conocemos de sobra y las podemos degustar cuando queramos, así que, pese a que su oferta era bastante tentadora (allí estaba la Superpetra, Prunus Persica y su colaboración Things...), no cayó ninguna de ellas. Como decíamos al principio, la feria fue un éxito de asistencia. Además de la gente del pueblo, y de los alrededores, se animó a ir gente de Pamplona, y nos consta que la carpa se llenó por la tarde de gente ávida de probar buena cerveza, y de disfrutar del gran ambiente cervecero, y sobre todo, de fiesta, que se vive en esta feria. ¡El año que viene más!
Visita express pero no por ello falta de interés... Desde luego que tiene mucho mérito no solo conseguir asistencia de público sino también arrastrar a tantos cerveceros a un pueblo tan pequeño. A ver si algún año me viene bien acercarme! Enhorabuena a Sesma por el exitazo! Saludos!!
ResponderEliminarP.D. ¿¿¿Tovarisch en botella???? ¿Por fin? ¿Cuándo, dónde...? Necesito más infoooo!!
La verdad es que tiene un mérito inmenso, pero cuando hasta el ayuntamiento se vuelca en la organización de la feria, será por algo... Me consta que los cerveceros estuvieron muy a gusto, así que no me sorprendería que repitiesen la mayoría el año que viene también.
EliminarLa Tovarisch no sé si saldrá en botella, en barril o petaca, lo leí por ahí el otro día, y no tuve ocasión de preguntárselo a ellos directamente, así que espero no haber dado rienda suelta a un bulo... jajaja
La verdad que un ambientazo cojonudo y una camaradería excepcional, pude verlo también a la hora de la comida que estuvimos todos juntos comiendo en el bar del pueblo.,
ResponderEliminarLo que disfrute conociendo a nuevos amigos cerveceros y ante todo , jolines casi ficho por Laugar, que estaba con ellos en la gloria.
Ademas tener una feria asi a solo 25km de casa.. es un lujo.
ESAS VISITAS EXPRES A FERIAS ME SUENAN JIJIJU, OS COMPRENDO.
ResponderEliminarME ALEGRO QUE LO HAYAIS PASADO BIEN.
SALUDOS!
Las ferias de tamaño pequeño siempre te dan la oportunidad de charlar más con los cerveceros, pues no tienes que estar para arriba y para abajo loco por ver qué vas a probar
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