
Pues bien, hace apenas un mes, en la feria cervecera celebrada en Vitoria, y en la cual hubo actividades para bloggers (a las cuales lamentablemente, y por falta de tiempo, no pudimos acudir), en una de las mesas redondas, se decidió recuperar esta vieja y sana costumbre. La verdad es que me alegra que se recupere una actividad en la que estuvimos involucrados muchos de nosotros, y que a mi parecer, siempre aporta frescura y temas en los que pensar a la comunidad a la que pertenecemos.
Pero dejémonos de palabrería y vayamos al grano. Para esta primera ronda de la nueva etapa, El Jardin del Lúpulo proponía el siguiente tema: ¿Qué prejuicios solemos tener antes de beber una cerveza de microcervecería española?
He de decir que he estado pensando hasta última hora en si participar o no. Primero, porque me parece un tema complicado. No sabía por donde cogerlo y no veía la forma de enfocarlo sin hacer daño al sector, cosa que, personalmente, no me interesa. Crear un debate sano sobre este tema, me parece muy, pero que muy difícil, por no decir imposible. Como después he ido viendo en otras aportaciones de varios blogs, hay bloggers que no participarán en esta ronda por pensar que además de críticas y malos rollos, este tema no va a aportar nada más. Pero no participar tampoco me satisfacía, porque quería ser parte de este relanzamiento de la Ronda. Que la ronda empiece con cierta fuerza me parece importante, y no participar en esta me habría dado pena, ya que es la primera de una nueva era, así que voy a intentar ser lo más neutral posible, sin faltar a la verdad. Creo que lo puedo hacer...
He probado bastantes cervezas de micros nacionales, y la verdad es que prejuicios, como tales, por fallos concretos, no tengo. He visto en varias entradas que otros bloggers remarcan los fallos que suelen ser más habituales, como sobrecarbonataciones, posos, maduraciones incompletas... nada que no hayamos encontrado en cervezas venidas del extranjero, la verdad sea dicha. Que a veces pasa, sí. No lo voy a negar. Si alguien dijera que bebe cerveza artesana y nunca ha sufrido un geiser, sería un mentiroso (o que no ha probado las suficientes...). Que esto haga que pensemos que todas las cervezas españolas vayan a tener sobrecarbonatación, pues tampoco.
También faltaría a la verdad si dijera que compro cervezas nacionales como antes. Hubo un tiempo en el que todo lo que veía lo compraba y lo probaba. Ya no. Pero no porque sean malas o tenga miedo a que no estén en las mejores condiciones, sino porque el mercado cada vez está más saturado de marcas de aquí, y cada vez es más difícil conocer todo lo que está al alcance de nuestra mano (además de fuera del alcance de nuestro bolsillo). Hace tiempo ya que solo compro las cervezas de las que he oído buenas referencias en blogs y otros medios especializados del sector. Alguna vez me equivoco, sí, pero las menos. Porque, aunque a algunos les duela, los blogs son una buena herramienta para conocer el mercado, por lo menos en parte, y así evitar muchos chascos. También parto una lanza a favor de "los otros", ya que utilizando solo la información positiva, se puede acertar en las compras, así que queda demostrado, que se pueden hacer recomendaciones sin falta de menospreciar ni dañar a nadie, pero ojo, que aquí cada cual también es libre de "informar" de la manera que mejor le parezca.
Volviendo al tema de los prejuicios, vuelvo a lo de antes. Prejuicios, ninguno. No tiene por qué pagar nadie la poca profesionalidad de otros, así que sería bastante hipócrita por mi parte generalizar en este tema. Que hay cervezas con fallos que no deberían estar en las estanterías, por supuesto, pero volvemos a lo de siempre. Este sector todavía está en pañales, y hay cosas que a mi parecer hay que saber perdonar y olvidar, o aunque no queramos olvidar, por lo menos no desperdigar la mierda para que otros no tengan que barrer su casa sin haberla manchado...