martes, 11 de enero de 2011

LEY ANTITABACO

Después de un mes de Diciembre especialmente duro, me siento a las teclas para hablar sobre un tema que hacía tiempo que quería tocar, pero por falta de tiempo, y quizás esperando a ver por dónde iban los tiros, no había podido comentar. Este tema no es más que la ya famosa ley antitabaco, en su vertiente más polémica; la prohibición de fumar en la hostelería. Diré que yo mismo soy hostelero, así que soy uno de los agraciados/desafortunados a los que les ha tocado más de cerca. Llevamos unos días en los que en todos los telediarios (o "partes", como dirían nuestras abuelas) se hacen eco de noticias relacionadas con este tema, pero...no entiendo el enfoque que se le está dando. Es más, además de que no lo entiendo, me enerva. Me explico. Lo único que sale en la televisión son bares que se saltan la ley sin tapujos, hosteleros que el día 2 de Enero despiden a trabajadores por culpa de la ley (hacía horas que había entrado en vigor cuando vi esta noticia...), bares que se transforman en sociedades gastronómicas sin ánimo de lucro (ya me diréis entonces qué gana el hostelero en cuestión...), y un sin fin de gente quejándose y saltándose la ley por todas partes. ¿Por qué no sacan los bares que no han perdido clientela (la gran mayoría)? ¿Los que incluso la han ganado? Los propios fumadores no llevaban a sus hijos a los bares por el ambiente insalubre que se respiraba (reconocido en persona por varios de ellos).No entiendo el afán de medios públicos (y privados) por demostrar que la ley es un error y que hay diferentes formas de saltársela. ¿Acaso nos enseñan a "héroes" que conducen con tasas de alcoholemia por encima de lo permitido? ¿Dedican minutos de reportajes a gente que circula a 230 Km/h por la autopista? Entonces, ¿por qué le dan publicidad a un bar que se está riendo de todo el mundo, y que acabará acatando la ley como el resto?
En fin, ahora que por lo menos he dicho lo que pienso, ya me siento más tranquilo, y puedo dar mi versión objetiva de los hechos. Por lo que he podido comprobar en estos pocos días de ley, puedo decir, que, respetando a los fumadores y sus derechos (que según parece, cada día son menos), todo el mundo, o casi todo con el que he podido hablar, está encantado con la nueva atmósfera de los locales de hostelería, incluído yo, que ya no me levanto con tos de perro, ni me pican los ojos mientras trabajo, ni me huele la ropa a humo cuando llego a casa. El futuro que nos deparará, no sé cuál será, pero seguramente, se le echará la culpa a la ley, cuando en realidad, el problem viene de antes, de otra cosa llamada crisis.
En cuanto a los cerveceros, pienso que estamos de enhorabuena, ya que, como es sabido, la mejor atmósfera para degustar una buena cerveza, es una sin olores agresivos, como el del tabaco, así que, a priori, a partir de ahora, las consumiciones que tomemos en los bares, las disfrutaremos mucho más, ya que podremos distinguir los aromas y matices sin tener que rebuscar entre el humo de los cigarrillos.
Sé que hay mucha gente que se siente víctima de un recorte de derechos, pero creo que entre todos podremos hacer que esta ley sea una ley respetada como otras tantas, y que algún día, estas situaciones nos parezcan normales (como nos parece normal no fumar en un avión, o en una tienda de ropa), aunque a algunos medios de comunicación les pese e intenten todo lo contrario...