
Esta vez es El Baúl De Las Cervezas, desde donde se nos propone hablar sobre las webs de ratings. Esas páginas webs y aplicaciones que en ocasiones funcionan, incluso, a modo de red social, en las que la gente valora las cervezas que bebe y prueba.
El debate surge a la hora de hablar sobre la funcionalidad de estas páginas.

Volviendo al tema de las webs de ratings. ¿Son útiles? Bueno, se podría decir que sí, pero siempre con matices. Pueden ser útiles, pero nunca justas, y ese es el problema. Cuando busco si una cerveza está bien hecha o se enmarca dentro del estilo, o cuando busco para saber si una cerveza me va a gustar o no, rara vez me servirán de algo estas páginas. Las opiniones de los usuarios, siempre, o casi siempre están sesgadas. Nunca sabremos cuáles son los gustos reales de alguien, ni si es amigo del cervecero al que valora. Mucho menos si esa cerveza estaba en buenas condiciones, si la ha tomado adecuadamente, si es un lote pasado o con algún problema puntual... muchos factores que mucha gente que valora en las páginas no tiene en cuenta, y que pueden variar totalmente la percepción y posterior valoración de la cerveza que estamos tomando, y por lo tanto, influir en la valoración general de ella.
Así pues, diré que estas páginas me sirven más como control propio de lo que voy bebiendo, que para saber cómo es una cerveza en realidad. Si quiero conocer cómo es una cerveza realmente, y aquí rompo una lanza en nuestro favor, los bloggers, y barro para casa, lo mejor es buscar en blogs especializados del sector. Hay blogs con muy buenas fichas sobre cervezas, que no buscan puntuarla, si no, simplemente comentarla, y es éste comentario, el que le puede servir a la gente para decidirse a probar una cerveza o no. Está claro que encontraremos fichas más válidas, y otras menos, pero aquí es donde deberemos hacer un poco de trabajo de campo e investigar quién es o son los bloggers que se dedican altruistamente, por hobby o incluso por pasión, a comentar las cervezas que pueden llegar hasta nuestras manos. Podremos equivocarnos y comprar una cerveza que luego no nos guste, pero siempre es más fiable la opinión de alguien que ha bebido esa cerveza con intención de comentarla y dar a conocer su opinión en su blog o página web, que la de alguien que no conocemos, que un buen día se descargó una aplicación en el móvil, y empezó a valorar cervezas según sus propios gustos personales, sin tener en cuenta el daño que puede hacer valorando productos que realmente no comprende. Y aquí se vuelve a repetir uno de los temas que ya hemos comentado en alguna otra ocasión, y es que estas páginas y aplicaciones son un arma de doble filo para los cerveceros y profesionales del sector, ya que depende de en qué manos caigan, pueden ser muy peligrosas e incluso dañinas, ya sea por desconocimiento, o incluso por maldad. Pero esto es otro tema que, como digo, ya se ha comentado más veces, y que daría para otra ronda seguramente...